Partido Adjuntos Vs Residentes
PARTIDO ADJUNTOS VS RESIDENTES: NO HUBO HUMILLACIÓN
CRÓNICA DEL PARTIDO.
Ayer día 14-12-2011 se celebró en el Centro Deportivo Municipal de Moratalaz a las 19.00 horas en la pista número 1 el primer partido entre residentes y adjuntos del Servicio de Cardiología de la era Pacourihno.
Los adjuntos (entrenados por el archiconocido entrenador) formaron con el siguiente equipo de gala:
1. Eduardo Villacorta "el pulpo". Sus ocho manos fueron decisivas en el partido
2. Gabriel Eidelman "el Argentino". Un estudio genético reciente suyo ha mostrado que tiene la misma mutación en el gen de la Laminina que Messi.
3. Pablo Ávila "el pulmón". Su polivalencia y forma física fueron decisivas
4. Fernando Sarnago "la maravilla". Cuando fuerza física y talento se unen todo lo demás es baladí. Fue el mejor del partido (en los dos equipos)
5. Iago Sousa "la electricidad". Su rapidez y verticalidad desesperaron al contrario.
6. Pedro Luis "el guante". Lástima que su mano no se parece a su pie. Hubiese sido cirujano cardíaco.
7. Manuel Martínez-Sellés "el gran 9". Me recordó a Pauleta, jugador internacional portugués que militó en el Salamanca de primera división (yo era socio entonces) y que fichó por el Paris Saint-Germain. Jugaba de espaldas al balón mejor que muchos de frente.
El partido tuvo que comenzar a las 19.05 horas de la tarde motivado por el retraso del equipo de residentes. A las 19.00 horas sólo un residente (no nacido en España como no puede ser de otra manera) había sido puntual a la cita. El primer tiempo fue indudablemente del equipo de adjuntos, que en el minuto 5 del encuentro se adelantaban 0-1 por medicación del "Argentino". Tuvieron que transcurrir más de 20 minutos hasta que los residentes marcaron el empate a uno. Minutos antes del empate ya se oían dentro del equipo de residentes comentarios de preocupación, que llegaron incluso a la crispación en algún momento "tenías que haber ido tú" "este te toca a tí" "porqué no ayudáis más" "salgo de guardia" "mañana tengo guardia", etc.
Fue una primera parte apasionante, con alternativas en el marcador en ambos equipos, llegando al descanso con empate a 3 goles. Fue entonces, en la segunda parte, cuando los pies de los adjuntos "acostumbrados a los zuecos de tantas guardias", la espalda de los adjuntos "acostumbrados a tantos ecos a la derecha del paciente" y, la concentración mental "acostumbrada a la toma de decisiones clínicas importantes sobre los paciente", quebraron frente a la juventud de los residentes "10 años menos de media" y su forma física "5 horas diarias sentados al frente del ordenador haciendo informes de alta sin gasto físico alguno". En el momento que nuestros pies se llenaron de ampollas, nos comenzó a doler la espalda y perdimos la concentración pensando en los pacientes que tenemos que presentar en la sesión médico-quirúrgica bajamos la guardia y perdimos 8-6.
¿Dónde está la humillación? ¿Dónde se quedaron los 50 goles que los residentes pensaban nos iban a meter camino al partido? Una vez más la experiencia, la humildad, el haber sido cocineros antes que frailes, la calidad que siempre permanece aunque caduque la garantía quedaron patentes.
Y no lo digo yo, cronista imparcial donde los haya. Menos mal que hubo público. ¿Qué se lo pregunten a Loreto si no?
Un saludo a todos Pedro Luis, orgulloso de haber formado parte de un equipo histórico (como el Barcelona)